Debemos proteger a nuestros hijos de los riesgos presentes en Internet.
Todos sabemos de las innumerables posibilidades que nos ofrece la Web, también a nuestros hijos y al resto del mundo. Dentro de todas esas posibilidades hay también contenidos no adecuados e incluso peligrosos y perjudiciales para algunos usuarios.
Los niños, dada su natural falta de criterio, los adolescentes por su curiosidad insaciable, y algunos otros grupos, son especialmente vulnerables y necesitan protección.
Una de las formas es utilizar un programa que permita el bloqueo mediante filtros, los hay gratuitos y de pago. Suelen contener un listado de sitios prohibidos y examinan los datos que se intercambian los usuarios; cuando lo detecta, la aplicación finaliza. No siempre estos programas son fiables totalmente y a veces filtran lo que no deben.
No obstante, la Asociación de Usuarios de Internet (AUI), dentro del programa “Internet para todos”, ha confirmado la idoneidad de los filtros más populares, llegando a la conclusión de que superan el 98% de efectividad en contenidos pornográficos; y 88% en otros contenidos, como drogas, violencia, sectas, etc.
El video hace publicidad de las utilidades de Optenetpc, un programa de filtro para internet, permite bloquear los contenidos porno, juegos de azar, compras, chats, … tiempos de descarga, emisión de datos personales, etc.
En todo caso en necesario, no confiarlo todo al sofware y ocuparnos de los niños y adolescentes, haciéndoles comprender los riesgos que se pueden encontrar, las mil posibles trampas que pueden aparecer y en sentido positivo lo que sí pueden hacer. Les damos la libertad que sepan utilizar. Es necesario concretar las acciones que nunca deben realizar, como dar datos personales o bancarios, quedar con alguien que han conocido en un chat, participar en los concursos, pretender recibir los regalos que les ofrecen con una pregunta tan fácil, etc; deben preguntar a un adulto cuando encuentren algo sospechoso en sus investigaciones, no bajarse juegos sin haber sido previamente autorizados, y así hasta donde queramos poner los limites. Y volvemos al sentido común de los hijos y de los padres.
Los niños, dada su natural falta de criterio, los adolescentes por su curiosidad insaciable, y algunos otros grupos, son especialmente vulnerables y necesitan protección.
Una de las formas es utilizar un programa que permita el bloqueo mediante filtros, los hay gratuitos y de pago. Suelen contener un listado de sitios prohibidos y examinan los datos que se intercambian los usuarios; cuando lo detecta, la aplicación finaliza. No siempre estos programas son fiables totalmente y a veces filtran lo que no deben.
No obstante, la Asociación de Usuarios de Internet (AUI), dentro del programa “Internet para todos”, ha confirmado la idoneidad de los filtros más populares, llegando a la conclusión de que superan el 98% de efectividad en contenidos pornográficos; y 88% en otros contenidos, como drogas, violencia, sectas, etc.
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En todo caso en necesario, no confiarlo todo al sofware y ocuparnos de los niños y adolescentes, haciéndoles comprender los riesgos que se pueden encontrar, las mil posibles trampas que pueden aparecer y en sentido positivo lo que sí pueden hacer. Les damos la libertad que sepan utilizar. Es necesario concretar las acciones que nunca deben realizar, como dar datos personales o bancarios, quedar con alguien que han conocido en un chat, participar en los concursos, pretender recibir los regalos que les ofrecen con una pregunta tan fácil, etc; deben preguntar a un adulto cuando encuentren algo sospechoso en sus investigaciones, no bajarse juegos sin haber sido previamente autorizados, y así hasta donde queramos poner los limites. Y volvemos al sentido común de los hijos y de los padres.
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